Julio 2012

Maria Doll, entrenadora certificada de etiqueta para niños y adolescentes con Your Style Matters, es una publicación invitada en Family Fun Calgary hoy.

Como padres, podríamos cometer el error de pensar que nuestros hijos aprenderán buenos modales por ósmosis o sentido común. Hoy en día, el sentido común no es tan común y muchas veces también podemos ser culpables de no mostrar los mejores modales de manera constante. Como punto de partida, nuestros hijos necesitan aprender la importancia de hacer buenas presentaciones. Al igual que jugar cualquier deporte o instrumento, se necesita práctica para que se convierta en una segunda naturaleza. ¡Los buenos modales vienen con la práctica!

¿Cuándo pueden los niños practicar cómo hacer presentaciones? Todo el tiempo; especialmente durante los meses de verano, cuando las familias a menudo planean reuniones para que los familiares puedan volver a conectarse o cuando sus hijos se encuentran con el padre de uno de sus compañeros de escuela. Estas se convierten en grandes oportunidades para ayudar a los niños a dar una excelente primera impresión al hacer una buena presentación.

Aquí están los 6 pasos para una introducción:
1. levantarse – especialmente cuando la persona con la que se encuentran está de pie.
2. Hacer contacto visual – Esto demuestra honestidad y apertura.
3. ¡Sonreír! – Una sonrisa muestra simpatía y es invitante.
4. Extiende tu mano derecha – piensa en “web a web”. La red de tu mano debe tocar la red de la otra mano. Sujete firmemente y agite dos veces. Conectar las "redes" entre sí evita los apretones de manos sueltos y del tipo triturador de huesos.
5. Presentarte: Di "Hola, mi nombre es Robert".
6. Responder en especie: Decir "Encantado de conocerte, Susan" a cambio te ayudará a recordar su nombre. Si la persona es un adulto, los niños deben usar el honorífico correcto, por ejemplo: Sr., Sra., Srta., Dr. y el apellido. No es una etiqueta correcta que los niños usen el primer nombre de un adulto no relacionado que no haya dado permiso primero.

Practicar estos pasos resultará en presentaciones bien hechas y con confianza. Considere el juego de roles con sus hijos usando sombreros tontos y nombres ficticios divertidos antes de cualquier evento para ayudar a reforzar estos pasos. Incluso los niños de tan solo tres años pueden aprender a decir "Hola", hacer contacto visual y dar la mano.

Cuando los niños regresen a la escuela, estarán ansiosos por conocer a sus nuevos maestros y usar sus nuevas habilidades, y también puede alentar a sus hijos a que le presenten a sus amigos. La rutina y saber lo que se espera son muy importantes para que los niños se sientan seguros y protegidos.